Sorprendente nuevo LP de Skee Mask – Pool (Ilian Tape).

Para algunos Pool es largo, demasiado largo, pero el álbum sostiene su poder mediante el equilibrio de cada extremo crudo y cada patada voladora es metódicamente balanceada por un número igual de elementos etéreos y emotivos. Con Pool, el productor Bávaro llega a un clímax que se asemeja a un tono de sueño afiebrado.

Pool sintetiza muchos de los ingredientes de la firma del trabajo de Skee Mask en años recientes, especialmente los ritmos rotos y un diseño de sonido preciso que hace distintivo este conjuntos de temas.

El título de apertura “Nvivo” y más adelante “LFO”, son sutiles manifiestos en los cuales los tonos atmosféricos y líneas de bajo subterráneas edifica una discreta tensión. Temas como “Rdvnedub” y “Breathing Method” invoca ritmos de breakbeat que ha terminado por definir la identidad sonora de Ilian Tape, y está estilísticamente más cercano a los primeros trabajos de Skee Mask, como Shred.

Por el otro lado, otros momentos nos regalan una creatividad desatada de aquellos primeros tiempos del proyecto, con tracks como “Kozmic Flush” de Compro. Por ejemplo en “Testo BC Mashup”, bloques ambientales se derraman como agua cobre un despiadado ritmo drum & bass. Otro tema sobresaliente es “DJ Camo Bro” en la cual un palpitante efecto de arpeggios, tan rápidos como aleteo de colibrí, actúa simultáneamente como ritmo y melodía. Este juego constante entre lo duro y suave, caos y fineza, es un tema central de Pool, una yuxtaposición que propone una tensión dinámica y arrolladora.

Como anteriores producciones de Müller, Pool mezcla lo extraño con lo elegante con una atención asombrosa en el detalle. Aunque este álbum es menos refinado que Compro, está salpicado de agradables sorpresas, como las ocasionales infusiones de jazz y funk, o el giro repentino a ritmos mid-tempo. Solo hasta que nuestros cerebros y cuerpos sienten que podrían explotar con un exceso de percusión programada, Skee Mask desciende con “Ozone” a una marca media, un arreglo ambient que actúa como un intermedio y se reinicia antes de construir de nuevo su fuerza contenida.

Pool muestra la originalidad distintiva de Skee Mask la cual está remarcada con inesperadas rupturas de la norma. (Esto aplica formalmente y también como método de lanzamiento. Müller lo puso en circulación sin anuncio previo y no dio acceso al disco desde los servicios de streaming). Hablando del sonido, el saxofón barítono de “Collapse Casual” marca uno de los muchos momentos del álbum imbuidos de jazz. El artista también evita un tempo consistente. Mucho de Pool evita superar el de anteriores producciones, y en ocasiones ritmos apretadamente concatenados entra el umbral de los más de 170 BPM. Aunque algunos tracks serían adiciones adecuadas para cualquier DJ set en altas horas de la noche, en su mayor parte la meta de Pool no es poner a bailar a las personas, optando por el contrario por un abordaje más cerebral.

Pero el trabajo de Müller rara vez es solo dulce cerebral; ritmos hiper contagiosos y melodías efusivas nos mantiene atados al reino de lo físico. Pool no sacrifica la diversión a costa del viaje cerebral. Se puede escuchar esto en momentos de tomar riesgos estilísticos, como esa floja melodía funk de “Crosssection” y el protagonismo de un solo de guitarra en “Harrison Ford”. Con Pool, hay una sensación de que Skee está explorando los límites exteriores de un sonido que ya era sutilmente innovador. Como resultado, funciona para una variada y recompensada escucha, el retrato de un artista techno en su esplendor.

[Traducido por G. Komand del texto de Taylor Bratches en Resident Advisor reviews].

Compra el álbum digital en Bandcamp.