Es bien sabido el trasfondo en la formación de Kraftwerk desde su origen son sus acentuados componentes de música electrónica experimental, el pop y la vanguardia alemana. La leyenda empieza en Düsseldorf en 1969 con Ralf Hütter (teclados, electrónica) y Florian Schneider-Esleben (flauta, violín, teclados, electrónica).